El Nissan Leaf llegó a nuestro país con el título del auto eléctrico más vendido del mundo como una de sus principales cartas de presentación, condición que se reafirmó una vez más al superar las 400.000 unidades vendidas desde el lanzamiento de su primera generación en 2010.
Así lo anunció la marca japonesa en un comunicado difundido recientemente. “Este hito es la prueba innegable de que los 400.000 clientes -y contando- valoran al Leaf por la emoción, confianza y conexión que proporciona. Leaf continúa siendo el ícono de Nissan Intelligent Mobility, nuestra visión de marca para transportar a las personas a un mundo mejor”, señaló al respecto Daniele Schillaci, vicepresidente ejecutivo y jefe de la división de Mercadotecnia, Ventas y Vehículos Eléctricos de la compañía.
El hatchback mediano de Nissan logró popularizar los autos eléctricos, pasando de ser productos de nicho –cuyos clientes eran considerados pioneros- a convertirse en vehículos masivos, que en muchos países además reciben beneficios fiscales por su característica de cero emisiones. Tal es así que la firma nipona ha desarrollado alianzas mediante su iniciativa Nissan Energy, que impulsa la capacidad de sus baterías para almacenar energía y distribuirlas en hogares, negocios y redes eléctricas, dando mayor utilidad a las unidades frente a un automóvil convencional. Si bien en nuestro país el contexto actual es diferente, el Leaf representa el primer paso de una automotriz en lo que será la movilidad del futuro.
Algunos datos interesantes difundidos por la compañía que reflejan la aceptación y las ventajas que ofrece un vehículo eléctrico son que los propietarios del Leaf han conducido más de 10.000 millones de kilómetros en total; que la cantidad de unidades de este modelo vendidos desde 2010 son suficientes como para ahorrar 3,8 millones de barriles de petróleo al año y que el hatch es el eléctrico más vendido de Europa –en Noruega incluso es el vehículo de cualquier tipo más patentado desde hace ya varios años-.
Actualmente, el Leaf se fabrica en tres plantas: Oppama, Japón; Sunderland, Inglaterra; y Smyrna, Tennessee (EE.UU.) y este año, además de su arribo a ocho mercados de América Latina (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Uruguay y Puerto Rico), también será comercializado en otros siete países de Asia y Oceanía.