Industria automotriz europea advierte de riesgos para el sector

La amenaza de una salida desordenada del Reino Unido de la Unión Europea (UE), o Brexit, la posibilidad de que Estados Unidos imponga aranceles a la industria automotriz y los objetivos medioambientales dispuestos por el bloque comunitario, entrañan serios escollos para la industria automotriz europea, estableció la entidad.

Faltando poco más de un mes para el Brexit, lamentablemente todavía no se puede descartar la posibilidad de una salida caótica, alertó la comunicación, lo que provoca una enorme incertidumbre para la economía europea y afecta la confianza del consumidor.

Ante esta coyuntura, abundó, algunos fabricantes de automóviles buscan lugares para almacenar partes, unos planean un cierre temporal de la producción después del Brexit, mientras otros están recortando sus inversiones en el Reino Unido.

Igualmente, la amenaza de que los aranceles estadounidenses se impongan a las importaciones de vehículos automotores y autopartes de Europa lamentablemente se ha vuelto muy real desde la presentación del informe del Departamento de Comercio de Estados Unidos a propósito de este tema.

Los gravámenes adicionales significarían que todos los fabricantes de automóviles en Estados Unidos, ya sean nacionales o internacionales, enfrentarían un aumento significativo en los costos, lo que, a su vez, podría significar un aumento del producto final por el que deben pagar los consumidores.

Ante esta coyuntura, la Comisión Europea indicó claramente que tiene la intención de tomar represalias contra la imposición de medidas. El potencial para que esta situación se intensifique es extremadamente preocupante para las empresas en ambos lados del Atlántico, significó ACEA.

Cualquier medida restrictiva del comercio no solo afectará gravemente a la industria automotriz de la UE, añadió, sino también a la economía y los consumidores de Estados Unidos.

En medio de este desafiante clima comercial, los objetivos recientemente acordados para 2025 y 2030 en relación a la disminución de las emisiones de dióxido de carbono de los automóviles y camionetas nuevos también serán extremadamente exigentes para la industria automotriz de Europa.

Según el comunicado, durante el año pasado, las ventas de automóviles en la UE se mantuvieron estables en comparación con 2017, con un crecimiento de 0,1 por ciento.

Aunque 2018 marcó el quinto año consecutivo de crecimiento, con casi 15 millones 200 mil autos registrados, el nivel de crecimiento se ha desacelerado rápidamente, remarcó.

ACEA representa a los 15 principales fabricantes europeos de automóviles, camionetas, camiones y autobuses.